Optimizar el coste de la terapia es hacerlo menor que el de seguir soportando la situación que el cliente quiere cambiar: que el valor de los beneficios sea mayor que el precio de los honorarios. Nuestra experiencia, metodología y conocimientos nos permiten:
- Reducir los costes del cliente. Menos dinero invertido, resultante de multiplicar el total de sesiones por el coste de cada sesión; menos tiempo dedicado al tratamiento, menos desplazamientos; menor malestar por los síntomas, incapacidades y bloqueos, y menor frustración de buscar infructuosamente ayuda válida...
- Aumentar la eficacia de nuestra ayuda profesional, más completa, actualizada y sólida para conocerse, gestionarse y funcionar mejor en los ámbitos de salud, relaciones afectivas, vida profesional y social…
Ofrecemos el servicio que nos gustaría recibir. Y si al invertir en inmobiliaria la clave es la ubicación, en salud la clave es la calidad. Menores honorarios ó sesiones gratis no implica menor coste de tratamiento si el plazo de intervención es mayor ó si la calidad profesional y recursos dedicados es menor. Como no estamos de acuerdo con el “captar clientes y facturar a cualquier precio” invitamos a valorar el servicio profesional por lo que realmente obtenemos y sus costes.
Nuestros clientes coinciden con nosotros en que el coste comparado de la atención psicológica de calidad es bajo. Estar ÓptimaMente nos costará ¿más que el dinero que perdemos por nuestras dificultades?¿menos que una operación de estética? ¿más que cambiar de coche? ¿menos que cambiar de trabajo?...